Sevilla, 12/I/2020
Hay una canción en mi banda sonora vital que me llena siempre de emoción ante momentos difíciles. Se trata de una canción preciosa de Pablo Milanés, Solo te pido, que resuena hoy con más fuerza que nunca cambiando lo que haya que cambiar en referencia a renunciar a los personalismos y abrir los tiempos verbales a una conjugación de todas las personas que confiamos en el nuevo Gobierno de Coalición.
Ante el momento histórico que vamos a vivir a partir de mañana, me tomo la licencia de adaptar la letra a estos tiempos actuales de la política en España y creo que acaba sonando igual esa canción tan bella, pidiendo al nuevo Gobierno de Coalición que llenen nuestros espacios vitales, personales y colectivos, con su luz política, que no se queden los proyectos en papeles grises, que saben que millones de personas de este país creemos que otro mundo es posible, que nos llenen de razones para respirar en el clima tan contaminado en la actualidad; que no se hagan las cosas por complacer a unos y a otros sino como reconocimiento a unos derechos como personas y que no hablen solo por hablar.
De verdad, que llenen nuestros espacios vitales con su nueva luz:
No os pedimos
que nos bajéis una estrella azul
solo os pedimos
que nuestro espacio llenéis con vuestra luz
No os pedimos
que nos firméis diez papeles grises para confiar
solo os pedimos
que queráis las palomas que solemos mirar
De lo pasado no lo vamos a negar
el futuro mejor algún día llegará
y del presente qué le importa a la gente
si es que siempre van a hablar
Seguid llenando este minuto
de razones para respirar
no nos complazcáis solo, no os neguéis a los cambios,
no habléis por hablar
Nos os pedimos
que nos bajéis una estrella azul
solo os pedimos
que nuestro espacio llenéis con vuestra luz
Se lo debo hoy a Pablo Milanés: seguir confiando en que otro mundo es posible en beneficio de todos. Sus canciones y su ideología me han llenado siempre de ganas de seguir viviendo dignamente. Esa es la razón de compartirlo.
CLÁUSULA ÉTICA DE DIVULGACIÓN: José Antonio Cobeña Fernández no trabaja para ninguna empresa u organización religiosa, política, gubernamental o no gubernamental, que pueda beneficiarse de este artículo, no las asesora, no posee acciones en ellas ni recibe financiación o prebenda alguna de ellas. Tampoco declara otras vinculaciones relevantes aparte de su situación actual de jubilado.